Título en movimiento I will love you forever

lunes, 19 de agosto de 2013

Su corazón latía con fuerza, había estado deprimido al creer que había metido la pata por completo, pero las palabras de su hermano le evidencias que no era de aquella manera, que ambos habían interpretado mal las cosas, ¿se expresó mal cuando paró las cosas en la ducha? Seguramente fuera de aquella forma, había estado muy nervioso en ese momento, y es que era normal dadas las circunstancias, si se había confundido no era por no saber que sintiera por el mayor o que deseara, sino porque veía a su hermano vulnerable y no quería precipitarlo por eso, por pensar que lo mismo luego de la operación no sabía lo que estaba haciendo realmente. Y por lo que veía había estado completamente errado con eso, aunque ambos interpretaron mal las cosas, y era una suerte que hubieran hablado del asunto antes que dejar que pasara al tiempo pensando de aquella manera. 

Suspiró oyendo aquellas palabras y vio como éste se acercara a su rostro, quedándose quieto y esbozando una sonrisa al sentir aquellas manos posarse sobre su mejilla, tanteándole, suspirando y entrecerrando un poco los ojos, pero no dejando de observarle, no quería perderse detalle de su rostro en ese momento. -Yo quisiera poder ver como me miras...- susurró en voz baja, levantando una mano y acariciando suavemente una de las de éste que tenía posada en su mejilla. Estaba muy ruborizado, y se ruborizó bastante más sin poder evitarlo, cerrando finalmente los ojos cuando éste le estrechó suavemente entre sus brazos, apoyando la cabeza sobre su hombro, quedándose de ese modo hasta que finalmente llegaron a su destino. Se apearon del taxi y tomo la mano de su hermano, conduciéndole con cuidado a la casa y entrando con él, viendo todo muy polvoriento debido al tiempo que llevaba abandonado. -Tengo que hacer mucha limpieza...- murmuró pasando un dedo por una mesa, viendo la cantidad de polvo que tenía, sacudiendo la mano y suspirando mientras paseaba por la casa, acercándose de nuevo a Itachi y agarrándole del brazo temiendo que tropezara o algo, estar ciego así de pronto era difícil.

-¿Qué?- le miró cuando dijo aquello de la comida y le llevó de la mano hasta el salón, quitando una sábana del sofá, al menos algunos muebles tenían sábanas para evitar el polvo, aunque lo sacudió un poco antes de hacer que se sentara. -Voy a esmerarme por alimentarnos a los dos, aunque ahora voy a hacer una llamada y pedir una pizza- comentó cogiendo su móvil y sentándose al lado de éste, pidiendo dos pizzas familiares, con alas de pollo, bebida y postre. -Ya mañana iré de compras para la nevera, y haré limpieza- miró alrededor. -Hay que poner muchas cosas al día por aquí- susurró apoyando la cabeza sobre su hombro. -Quiero esmerarme para ti- murmuró dadas sus palabras de hace un momento, cerrando los ojos y quedándose de aquella manera. -No te preocupes por nada.

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