I will love you forever

Se sorprende su contestación y se queda pensando en ello, la verdad es que no le gustaría estar vegetal y vivo, aunque si eso hiciera feliz a Itachi por estar vivo, tal vez tampoco sería malo. Igual se estremece cuando le hablaba de que le amaba, ¿por qué su mente pensaba sin parar lo que le gustaría que ese tipo de amor no fuera precisamente fraternal? Negó para sí, algo aliviado de que el mayor no pudiera ver sus reacciones. -Bueno, me alegro que mi decisión te pareciera bien, me inquietaba un poco, aunque de todas formas... espero que te recuperes del todo- murmuró deseando que éste finalmente recuperara la vista, aunque quien sabe que pasaría al final con eso, debía ser duro no ver nada. La verdad es que le dolía verle así, porque Itachi era un hombre fuerte, independiente desde siempre, y ahora estaba ciego, no era algo que se mereciera, tanto sufrimiento. Aunque claro, podría ser peor. 

Mientras hablaban de eso le colocó bajo el agua y le comentó que si necesitaba ayuda le dijera, no sabía hasta que punto se podría bañar, al menos sabía que tendría que alcanzarle el champú y el gel, poco más, solo sabia que le ayudaría en lo que le pidiera. -¿Quieres... algo?- preguntó nervioso cuando el mayor le tocó el hombro y deslizó las manos por sus caderas, estremeciéndose con las mejillas muy rojas. Tenía a su hermano desnudo, ambos desnudos, y este estaba pasando las manos por su cintura, ¿era aquello una especie de prueba divina? Traga saliva y trata de no ver su cuerpo, aunque miraba su rostro y no ayudaba, no dejaba de pensar en las ganas que tenia de sencillamente besarle y acercarse a su cuerpo más, pero eran cosas que no haría. Y agradecía que éste estuviera ciego en ese momento, así no vería aquella vergonzosa e indebida reacción de su cuerpo ante su desnudez. -¿I...tachi?- llamó nervioso poco antes de que éste le abrazara, sintiendo que su corazón latía fuertemente, no era de piedra, y su hermano, quien amaba, le estaba abrazando desnudo.

Se quedó de piedra, completamente quieto a excepción de unos pequeños temblores nerviosos que recorrían enteramente su cuerpo, cerrando los ojos y correspondiendo torpemente al abrazo, centrándose en que aquello era un abrazo inocente y nada más, que era su mente enferma y calenturienta la que reaccionaba así. Eso pensaba cuando sintió como sus cuerpos desnudos le hacía sentir el roce del miembro de su hermano, tragando saliva y abriendo los ojos, ¿su hermano estaba...? ¿Era por él? ¿Por su cercanía? Abre los ojos y le mira, viendo como seguidamente rozaba sus labios con los ajenos después de decirle que le amaba, y en ese momento siente una fuerte emoción en su pecho, ¿sería posible que su hermano sintiera lo mismo que él? Ese modo de acercarse a su cuerpo, de tocarle, hablarle, y además sentir su miembro de aquella forma. Cerró los ojos y se acercó a los labios de éste, haciendo un contacto firme entre ellos, besándole suavemente y pasando una mano por su cabello con lentitud, apostando por lo extraña de la situación, dejándose llevar y haciéndole ver un poco de aquellos sentimientos, aunque al pensar eso se apartó de sus labios, mordiendo levemente su labio inferior, suspirando. -Te amo...- susurró en voz baja, volviendo a rozar sus labios de modo más intenso.