I will love you forever

Nota como éste vuelve a acariciar su rostro de una forma realmente dedicada, demorándose en cada parte y haciendo que sus mejillas se presentaran muy calientes, agradecía en ese momento que su hermano no pudiera ver su estado, ¿qué pensaría de verle tan ruborizado ante unas caricias tan inocentes por su parte? Lo peor es cuando éste besa su mejilla tan cerca de su comisura, notando como el corazón le daba un vuelco y luchando contra sus dedos de juntar sus labios a los de éste, pero no podía, el gesto de su hermano fue sin querer por no veía, nada más. Se sentía como un enfermo, aunque pensaba que ellos dos no eran precisamente convencionales, menuda vida llevaban desde hace años, ¿no? Aunque ahora las cosas estaban diferentes, ahora todo parecía volver a su cauce, con Itachi libre de toda culpa. De todas formas trataba de buscar justificación a aquellos sentimientos que estaba re-descubriendo, al menos el alcance de los mismos, que eran más intensos de lo que hubiera esperado. Y mientras éste pasaba las manos sobre su rostro, siendo evidente dada su ceguera, no podía evitar fijarse en este, en lo hermoso que era, pero no era una belleza tipo chica, él era tan masculino, se le hacía demasiado irresistible. Si existía cielo e infierno tenía más claro que nunca que iba directo al infierno ante semejantes pensamientos, aunque no era algo meramente físico, era su querido hermano, amado hermano.

-No estoy llorando- negó lo evidente, claramente éste había notado sus lágrimas con sus dedos, aunque se siente reconfortado con aquel tono cariñoso de éste y sus caricias, mirándole con una pequeña sonrisa entre las lágrimas que brotaban de sus ojos, ahora menos constantes. -Fue culpa de ese hombre, de quien asesinó a nuestros padres...- no venía a cuento que ambos se fueran echando la culpa. Y entonces éste le dice que siempre le amó, esbozando una sonrisa, pensando inmediatamente que su amor y el suyo propio eran bien diferentes, éste le amaba como a su hermano pequeño, que era lo normal, y él le amaba como mucho más, cosa que estaba mal, muy mal. De todas formas se sentía feliz de oírle que quería estar con él toda la vida, puede que no le amara de la misma forma, pero le bastaba con tenerle cerca para siempre. -Eso es lo único que yo deseo- susurró en voz baja, aproximándose a éste y besando su mejilla, cerca de sus labios, cerca de su comisura, tal y como éste había hecho antes, aunque en su caso había sido completamente a propósito.