I will love you forever

Cabía la posibilidad de que aquello no fuera más que una confusión, un malentendido, que hubiera interpretar las acciones y palabras de su hermano de manera equivocada, y que el atrevimiento que tuvo de unir sus labios y decirle ese que amo estuviera de más y ocasionara que su hermano sintiera rechazo hacia él, pero realmente no había podido luchar contra aquel impulso. Había querido besarle y eso era lo que había hecho, porque no era solo excitación o deseo, los sentimientos que tenía hacia su hermano eran totalmente fuertes, intensos, y poco tenían que ver con lo fraternal. Aunque se hubiera dado cuenta de ello ante sus súbitos deseos de besarle y tenerle cerca, pero se sentía confuso por sentir aquellas cosas hacia su propio hermano, sangre de su sangre. Ahora no pudo resistirse, sus palabras y acercamientos despertaron aquello en su interior... y exterior, y como se decía coloquialmente "se había tirado a la piscina". Y su respuesta fue corresponder al beso.

Abrió sus ojos sorprendido cuando notó al mayor atrapar sus labios con los suyos, y seguidamente como tornaba aquel beso algo mucho más íntimo e incluso erótico, pues le notó meter la lengua en su boca para buscar la suya, cerrando los ojos con fuerza y correspondiendo al electrizante y envolvente roce, era su primer beso, en definitiva. Su vida siempre estuvo lleno de odio, de deseos de venganza, de tristeza, y nunca tuvo tiempo de pensar esas cosas, o tal vez sencillamente nadie había aparecido que sembrara esos deseos en él. Hasta Itachi. Éste le provocaba todo.

En medio de esas nuevas sensaciones nota algo más, la hombría de éste más firme y clara, rozarse un poco con la suya propia y provocándole ligeros temblores de placer, abriendo nuevamente los ojos, desorientado, gustándole demasiado eso, sentirle tan claramente, su piel, su cuerpo, su calor, pero por otro lado se sentía algo confuso, ¿y no estaba mal aquello? El agarre en su cabello se hace más firme y jadea contra sus labios y su lengua, sintiéndose muy sofocado. -Itachi...- susurró en voz baja, tragando saliva, inclinándose a morderle un poquito más fuerte sus labios, aunque no queriendo dañarle, se preguntaba su se notaba demasiado su inexperiencia besando, dios, era tan inexperto todo que... le hizo pensar en lo que estaba sucediendo en aquella bañera, apartándose un poco de los labios de éste y presionando las manos en los hombros de éste, apartándose un poco de forma suave y mirándole al rostro, nervioso. -Hermano... aquí no, yo no...- murmuró en voz baja, avergonzado, la verdad es que no sabía hasta donde podría llegar aquello, ni hasta donde deseaba llegar su hermano, peor él era virgen, y él estaba casi recién despertado de un coma, no lo veía, correcto. Se le quedó mirando y sintió su corazón palpitarle fuertemente, acercándose a besar sus labios. -Te amo... pero has despertado de un coma, y esto es precipitado... ¿te molestas?- preguntó preocupado, apartándose de nuevo de su cuerpo porque se sentía perder el control de tenerle así de cerca y en ese estado y condiciones ambos.